Me parece que el punto de partida de la película MEDIANOCHE EN PARIS es la novela “Un yanqui en la corte del Rey Arturo” de Mark Twain (podéis bajarla aquí ). No en vano el personaje principal, interpretado por Owen Wilson, lo dice a viva voz : “Toda la literatura moderna proviene de Mark Twain”.
“Un Yanqui…” cuenta la sencilla aventura de un tipo que, en medio de una gresca, recibe un porrazo en la cabeza y despierta en un camino que no reconoce. Pronto se topa con un caballero “vestido con una antigua armadura de hierro”. El pobre yanqui se encuentra en pleno camino a Camelot en el siglo VI. Tanto Twain como Woody Allen evaden la molestia de explicar sus viajes en el tiempo. La cosa puede suceder como un hechizo, algo puramente mágico. No pretenden hacer ciencia ficción. Apelan a la nostalgia y se instalan en el sitio. Tanto la Camelot de Twain como la Paris de Allen son estampas que solo existen en sus cabezas. Ambas son ciudades de fantasía.
II
Usualmente se le reprocha a Woody Allen que rebobine tanto sus ideas. Pero el hombre simplemente busca la película total, sus ideas se alimentan y retroalimentan . Son tautologías. Los personajes se explican entre sí. No existen más allá de su propio universo idílico. Y el idilio es quizás el primer sello de fábrica del Cine de Woody Allen. Agárrese cualquiera de sus filmes, de cualquier época, y podrá pescarse ese ensimismamiento Allenieano. En El dormilón un nerd se despierta dos siglos mas tarde en medio de un futuro que no entiende, en Zelig un narizón tiene el don de la ubicuidad, en la rosa purpura del cairo el actor atraviesa la pantalla y vive un affaire con una grupie, en Edipo reprimido, el mago desaparece a la horrorosa mamá… y así.
Y el otro sello de fábrica en el fetichismo. El hombre se crió en la década del 40 cuando el cine negro y los musicales pululaban en las carteleras neoyorkinas. Conoció el mundo a través del cine primero, de la literatura después. Entonces el jazz lo inundaba todo. Pasó más tiempo en el cine que en la calle, mas horas encerrado en su cuarto leyendo que jugando en los patios. Woody Allen vive en la burbuja del arte desde que nació es por ello que sus películas suelen ser cotidianas pero descabelladas. A su modo, realiza realismo mágico . No es el realismo mágico una forma de narrar lo maravilloso de la manera más natural?. Por supuesto que Woody Allen es el prototipo de intelectual burgués - acomodado y desde allí escruta el mundo. Pero sus historias son universales. Por ello ha establecido Vasos comunicantes con directores como Bergman y Fellini.
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